Las asociaciones ambientales que estamos con acusación particular personadas en la denuncia consideramos escasa la sanción propuesta de 800.000 euros por el Principado Hidroeléctrica del Cantábrico (HC) por el vertido de fuel a la ría de Aboño, nos resulta exigua en comparación con la gravedad del daño ocasionado al patrimonio natural y denota que la Administración sancionadora está dispuesta a dejar que hechos como el denunciado sigan perpetrándose, habida cuenta de que, para la empresa infractora, la multa que finalmente se le imponga no supone sino un mínimo coste adicional que puede solventar con una subida de tarifas a los consumidores, mientras a nuestras costas seguirán llegando durante años y con frecuencia los tóxicos vertidos al mar por la mercantil.
El expediente sancionador incoado por la Consejería de Fomento frente a HC, al que hemos tenido acceso en la causa penal, porque el Principado no nos permitio acceder al suyo en la vía administrativa contiene el informe emitido por la Dirección General de Calidad Ambiental en el que se pone de manifiesto que el vertido perpetrado el día 26 de julio del pasado año afectó a más de 118.000 metros cuadrados de zonas de baño donde fue necesario prohibir su uso para tal fin, a 86.000 metros cuadrados de costas rocosas, escolleras y plataformas intermareales y a más de 13.000 metros cuadrados de playa.
Según el mismo informe, el fuel recogido en las aguas del mar proveniente del vertido denunciado fue sometido a un estudio de biodegradabilidad, lixiviación y toxicidad, arrojando el alarmante resultando de estar compuesto en un 11,1 por ciento de asfaltenos, a los que califica el informe referido como “compuestos muy pesados y persistentes, no boidegradables”. A esta información se ha de añadir la suministrada por la Demarcación de Costas, que en sendos informes relata a medio de la Capitanía Marítima de Gijón que las manchas detectadas en alta mar eran de fuel demasiado fluido para poder ser recogido, declarando que, en la mayoría de los casos, “solo pudieron hacer maniobras de dispersión mecánica con las hélices de las embarcaciones”, lo que sugiere que la toxicidad permanece en el mar en estado disperso afectando a los recursos naturales y a la salud de las personas.
El vertido llegó a amenazar a la Reserva Natural Parcial de la Ría de Villaviciosa, así como al emisario de la toma de agua de mar del Acuario de Gijón, que hubo de ser sellado. Por parte del Servicio de Ordenación Pesquera se informó además que el fuel tóxico afectó a los recursos marisqueros y al izado de aparejos de pesca desde embarcación, creando serio riesgo para los campos de ocle de la zona, concretando en 567,33 las hectáreas dañadas en la capa correspondiente a calados de pesca.
Por todos estos hechos, la Consejería de Fomento propone sancionar a Hidroeléctrica del Cantábrico con una multa de 800.000 euros por la comisión de una infracción grave prevista en la Ley de Prevención y Control Integrados de la Contaminación, así como a la ejecución de las necesarias medidas de reparación (que no concreta) y compensatorias, y a indemnizar al Principado con la cuantía de 15.484 euros.
Coordinadora Ecoloxista d’Asturies
Asociación para la Defensa Jurídica del Medio Ambiente- ULEX
Colectivo Ecologista de Avilés
Plataforma por la Defensa de la Cordillera Cantábrica
Asociación para la Conservación y estudio del lobo – ASCEL
Grupo Ornitologia Mavea
Ixuxu
Asociación Verdes Asturianos
Para más información tfnos. 629892624 (Fruti) y 679574236 (Laura)