Problemas Energéticos de Asturias

El problema de la energía eléctrica en Asturies

“Un intento de resumir la realidad desde otra mirada”

 

Revisado 21-01-2012

 

 

 

–    La energía eléctrica no se puede almacenar en grandes cantidades, por lo que “sólo interesa” producirla cuando se consume, de otro modo se estarían generando pérdidas al sistema.

 

 

–    Asturias presenta el mayor consumo per cápita de electricidad del país debido  la alta intensidad energética de la industria regional. A pesar de ello, en muchas ocasiones exporto más del doble  de la energía eléctrica que genera en sus centrales, siempre que haya demanda.

 

 

–    El que los centros de producción estén alejados de los de consumo implica tener que transportar la energía. Esto se hace a través de las líneas de alta tensión, que son un factor contaminante por los campos electromagnéticos que generan, el impacto paisajístico, el incremento de incendios en las zonas forestales por donde pasan por el aumento en la caída de rayos… Pero además conlleva una importante pérdida de la energía producida: un 17% de media según Red Eléctrica.

 

 

– Con la potencia instalada en Asturies  de  4.276 MW (3.290 de régimen ordinario,  539 de régimen especial)  de los que 2700 son térmicos  de  carbón y 800 de gas supone una media de producción de 20.000 GWhora anuales (media de los 10 últimos años) pero, en función de la demanda, puede subir un año cualquiera a más de 24.000 Mw./hora o bajar a  11.478  como sucedió este pasado 2010. El consumo, por otra parte, está situado, con ligeras oscilaciones, en los 8.500 GWhoras con un pico de 9.619 (año 2006) anuales. Esto significa que podemos producir y  exportar mucha energía eléctrica. Tenemos el 2,4% de la población española y hemos  representado el 6,5% de la energia que vierte a la red.

 

 

– Tenemos 4 complejos térmicos (Aboño, Soto Ribera, Lada, Soto Barca) con 12 centrales carbón mas 2 centrales de gas en Soto Ribera,  2 central biomasa de Ence y Cogersa, varios centros de cogeneración de  gas como el de  Arcelor-Aviles,  HC-Aboño, 13 parques eólicos con 350 Mw.,  13 embalse hidráulicos con mas de 800 Mw, 26 minicentrales hidráulicas que generan 87 Mw y 15.000 metros de paneles de solar térmica, alguna mini parque solar fotovoltaico,  así como varias instalaciones de cogeneración importantes de gas.

 

 

– Esta producción ha ido cambiado en la última década, de ser  básicamente térmica en un 82  % en los grupos térmicos de carbón de; Aboño, Lada, Narcea, Soto de Ribera, la Pereda. De origen hidráulico el 11,  3% biomasa, 4% de cogeneración,  Hemos vivido en estos últimos 10 años una reducción del 60% en la producción térmica a partir de carbón, compensándose con el gas, lo que redujo a un 18% el descenso de producción térmica en el año 2010 quedándose en un 68% (8532 Mw/h), este año aumento la hidráulica por las lluvias llegando al un 19% (2195 Mw/h), aparece en los últimos años la eólica que el ultimo año represento el 6% (710 Mw./h), la biomasa se mantiene en un 3%.

 

 

– El consumo eléctrico asturiano es muy singular en porcentajes: casi el 82% es de origen industrial de éste, un 62% del consumo corresponde 3 empresas: Arcelor, AZSA, Alcoa. El consumo domestico y servicio es el  18%.  La media española es consumo es completamente diferente; industria 33%,  domestico y servicios 77%.

 

 

– A nivel estatal la potencia instalada es de más de 106.000 MW  y subiendo  siendo el máximo consumo diario máximo 45.540 MW el que se produjo el 17-12-07,  pero en ese mismo día el mínimo fue de 25.000 MW. El desfase que se produce en esos picos se debe a que al no poder almacenarse la energía, ésta tiene que estar ahí, por lo que es preciso que los centros de producción funcionen con previsiones del máximo de consumo diario y con una disposición para caso de averías o siniestros. De la potencia instalada 20.881 Mw son eólicos, 4.099 Mw fotovoltaica, 949 Mw la termosolar

 

 

– La energia a nivel estatal se produce casi  toda con materias de importación, 100% del
uranio, 99,5% del gas y petróleo, 55% del carbón. En el caso asturiano la procedencia es  del 100% de gas y petróleo, el 75% del carbón térmico.

 

 

Las previsiones estatales para el año 2020,  presenta un modelo en el que la potencia instalada habrá aumentado en un 25%, hasta los 126.072 megavatios (MW), de los que la mitad, 64.441 MW, serán renovables (frente a los 39.499 MW actuales), correspondiendo 35.000 MW a energía eólica, 16.662 MW a hidroeléctrica, 6.735 MW a solar fotovoltaica y 3.807 a termo solar. Por contra, la de la nuclear se reducirá en un 5,8%, hasta los 7.256 MW.

 

 

–    La producción energética diaria se regula a nivel estatal en un pool en el que participan Red
Eléctrica, el estado y las empresas eléctricas, de manera que, con una antelación de 48 horas, se planifica qué consumos puede haber, qué centros van a producir y cuáles están preparados para apoyar aumentos o fallos. Pero claro, a veces se equivocan y se quedan cortos (hay que recordar que si   se produce de más no se gasta y por lo tanto no la pagan).

 

 

–    Volvamos a Asturies: la energía que producimos se envía a otras zonas por  las actuales 9
líneas de alta tensión:  4 con Puente de San Miguel (Cantabria) 1 de 400 KV,  2 de 220 KV y 1 de 132 KV, 2  con  la Robla (León) de 400 KV y otra de 220 KV  a Villablino. Tenemos 3 líneas de 132 KV con Galicia de 132 que van a Mondoñedo y O’Ceao.

 

 

 Además, Red Eléctrica (REE,  propietario y explotador de las líneas de alta de todo el estado) tiene previsto ampliar a 400 KV la actual línea de la Corredoría-Antiñano a Grandas de Salime con un tramo nuevo a Fonsagrada. Esta línea  se sumaria al viejo proyecto de Lada a Velilla que ha pasado por varias opciones de recorrido que esperemos que se paralice por el actual que pasaría por Aller.

 

 

Además de las líneas tenemos los problemas de los impactos de las subestaciones de alta tensión,  hay previstas 13 nuevas y sus correspondientes líneas de interconexión (Grao,  Abres, Pesoz,  Cardo-Gozón,  Reboria-Carreño, Serin-Gijón, Tamón-Carreño, Musel-Gijón, Villallana-Lena, Telledo-Lena, Silvota-Llanera, San Claudio-Oviedo, Trasona-Corvera) además de la ampliación de las existentes y 2 que se acaban de hacer (Buspol en Salas y el Palo en Allande), el traslado de parte de Lada a Sama.

 

 

Hay que recordar que a pesar de que no funcionan las dos nuevas de 400 KV, nunca hay problemas de exportación, ni de saturación de la red, a pesar que todos los años se les cae una torre en Pajares de la línea de 400, por eso no pararon las térmicas de producir energía. La propia Red Eléctrica reconoce en sus memorias que presentemos unas líneas muy  seguras y sin problemas de saturación.

 

 

–    Es importante volver a explicar que cuando se produce en una térmica (carbón, gas, nuclear) o una hidráulica la energía se produce a poca tensión (la unidad de medida son los voltios) y allí mismo se transforma elevándola para evitar pérdidas. De esta forma, en las subestaciones eléctricas elevan todo lo que pueden la tensión para que en el transporte se pierda lo menos posible. Pero, a la vez, quienes viven cerca de las líneas o de las subestaciones ven aumentar el riesgo para su salud, por lo que se pide al menos que haya distancias de precaución. Ya que nadie sabe hoy cuáles son las distancias de seguridad para garantizar falta de efectos en la salud, se vienen marcando un metro de alejamiento por cada KV, con lo cual quienes tengan cerca una línea de 400 KV deberían intentar que no pasaran los cables a menos de 500 metros. También hay que decir que casi todos los expertos vienen a coincidir en que el enterramiento de las líneas no es mas que un maquillaje paisajístico pero que resulta más peligroso para la salud, porque implica estar más cerca del campo magnético: mientras que los aéreos están a 7 o más metros, las subterráneas están a poco más de 1 metro.

 

– Por otra parte las  térmicas de carbón,  en esto contesto económico  gran parte del año no funcionan, llegando los grupos más antiguos a funcionar solamente la mitad del año tienen. Más del  76%  del carbón que consumen las térmicas es importado y llega por el puerto del Musel; cada vez se consume más carbón importado en detrimento del asturiano. Esto es importante porque mucha gente apoya los desmanes de las térmicas creyendo que sólo se quema nuestro carbón y con ello se mantiene el sector de la minería subterránea, pero no es así.

 

 

–    En toda esta realidad ahora nos quieren vender mas instalaciones para duplicar la potencia Instalada se quiere llegar desde el Principado a 6620 MW instaladas con 5  nuevos térmicas    de gas,  ya funcionan 2 en Soto de Ribera (llegaron a existir 15 proyectos en el año 2006),   todo ello con  un total de potencia instalada de  5.200 MW.  (mas que la actual potencia térmica que es de 2700M W, 3 de ellos serian nuevos (Musel,  Nubledo, Pereda) en forma de centrales de ciclo combinado de gas (CCG), que no deja de ser una térmica alimentada por gas, bien sea a través del gaseoducto o la peligrosa regasificadora del  Musel (el gas, para ser transportado en los barcos metaneros se transforma en líquido y cuando se descarga para llevarlo por las tuberías hay que convertirlo de nuevo en gas).

 

 

– También nos preocupa la concentración de parque eolicos en el occidente asturiano, donde a pesar de la moratoria que estuvo vigente hasta el 16-4-08 esta funcionando  ya 15 con 356 MW, hay 2 en obras con 100 MW,  16 autorizado  con 490 MW y 65 pendientes de tramitación, en total van  a ser 1456 aerogeneradores con 2589 Mw instalados, todavía se habla de otros parques para el centro y oriente de la región.  Al final nos vamos a quedar con las térmicas de carbón, de gas y los eólicos.

 

 

–    El gas presenta importantes ventajas con respecto al carbón: es más eficiente ( 52% frente al 36,8% del carbón o el 33% de las nucleares), menos contaminante durante la combustión (no genera cenizas, apenas tiene azufre, produce menos dióxido de carbono CO2 y 100 veces menos óxidos de nitrógeno), se precisa menos superficie para su instalación, gasta menos agua en la refrigeración, supone menores tiempos de arranque ( apenas 20 minutos para verter y 100 para estar a plena carga frente al carbón que precisa 600 minutos),  supone menos inversión ( una de gas de 400 MW supone unos 200 millones euros/ año 2004 de carbón andaría por 240 millones). Pero también presenta varios problemas: no lo hay en Asturies y casi nada  en España, con lo cual el gas viene de Argelia (30%), Nigeria (21%) Qatar (15%) Egipto (8%), Trinidad Tobago (9%) y Noruega (5%), con lo que esto implica de dependencia de otras zonas. Por otra parte, es muy peligrosa su manipulación y almacenamiento. Crea muchísimo menos empleo en todo el proceso que el carbón. Por supuesto también contamina aunque sea menos que el carbón. El proyecto de la regasificadora en el Musel al lado de las viviendas y sin necesidad alguna. Tal como se puede ver repasando  la memoria de Enagas del año 2007 antes de la crisis, el grado de utilización del resto de regasificadora españolas; Barcelona que está utilizada al 30 % de su capacidad nominal; Huelva al 42 %; Cartagena al 29 %; Bilbao al 54 %; Sagunto al 73 %, y Mugardos – la Coruña al 29%. Ahora es mucho menor.

 

 

–    Ante esta situación, nuestra crítica a los nuevos proyectos es que éstos vienen a sumarse a los que ya tenemos, nunca se plantea sustituir las viejas y contaminantes térmicas de carbón por las de gas, con lo que de salir adelante estos planes tendríamos las centrales que tenemos, más las nuevas CCG, más los 59 parques eólicos que también nos quieren instalar.

 

 

Han parcheado las térmicas mas modernas (de los 80) para intentar cumplir  aparte de las directivas para el control del dióxido de carbono se suman otras, como la Directiva GIC (grandes instalaciones contaminantes) traspuesta en el Real Decreto 430/2004, que pretenden limitar las emisiones de óxidos de azufre, de nitrógeno y partículas en suspensión. Las centrales térmicas que sigue quemando carbón nacional deben cumplir los umbrales de emisión presentados en esta directiva, pero lo cierto es que aquí no lo hacen. Si no son capaces de hacer frente a tal reto, sólo se las autorizará a funcionar un máximo de 20.000 horas a partir de 2008 hasta el 2015. A esta formula se han acogido los grupos térmicos de carbón de Soto I, Soto II y Lada III, que totalizan 474 megawatios,

 

–    Todo ello en un mercado cautivo como dijimos, donde a nivel estatal hay previstos más de 90 proyectos de CGC y en los últimos 3 años se han abierto 50 centrales de gas, de estas 50 hay muchos días en las que no están funcionando ni la mitad. Esta  claro que la mayoría de proyectos  no saldrán adelante porque en gran medida son debidos a la batalla de las eléctricas por ponerse las primeras, perjudicar a la competencia, vender ilusión a los accionistas minoritarios (los que tienen la mayoría de las acciones muy repartidas y nunca deciden en los Consejos de Administración). En un mercado limitado porque nuestras posibilidades de exportar energía a otras zonas como hasta ahora va a estar más complicado, porque muchos de los proyectos previstos de CGC que ya están en fase de construcción o en funcionamiento se están haciendo en zonas hasta ahora deficitarias (Cataluña, Valencia,  Navarra, Andalucía). La posibilidad de exportar fuera del estado es muy remota ante la barrera de Francia, con unos vecinos como Marruecos y Portugal que si bien hasta ahora eran deficitarios en producción eléctrica, tienen planes muy ambiciosos, con lo que al final  venderán energía, porque las empresas españolas se están  instalando en el norte de África donde son menos exigentes en muchas materias, además de tener más cerca la materia prima y ya esta puesto la infraestructura para exportar la energía, el famoso cable submarino de Tarifa ahora duplicado.

 

 

–    Con todo esto, la conclusión a la que llegamos en la Coordinadora Ecoloxista d’Asturies, es que no necesitamos más potencia, ni más líneas. Que lo que precisamos es mantener nuestra capacidad, sin especializarnos más en un sector que genera muy pocos puestos de trabajo de forma continua,  únicamente crearía los debidos a su construcción en los 2 0 3 años que puedan suponer, pero hay recordar que un grupo térmico moderno funciona con una plantilla de 40 personas.

 

 

–    No podemos olvidar la proximidad de las nuevas instalaciones de combustión a núcleos de población  lo que agrava su impacto sobre sus colindantes en una región con graves problemas ambientales, un resumen de distancias es este:

 

Regasificadora en 2 km. hay 70.000 personas en 5 km. hay 300.000 personas
Soto Ribera en 2 Km. hay 1.500 personas en 5 km. hay 180.000 personas
Pereda en 2 km. hay 35.000 personas en 5 km. hay 50.000 personas
Musel y Aboño en 2 km. tiene 90.000 personas en 5 km. hay 270.000 ppersonas
Nubledo en 2 km hay 6.000 personas en 5 km hay 35.000 personas
Trubia en 2 Km hay 5.000 personas en 5 km. hay 50.000 personas
Lada en 2 km hay 50.000 personas en 5 km hay 70.000 personas

 

 

Coordinadora Ecoloxista d’Asturies, teléfono: 629892624 e-mail: correo (a) coordinadoraecoloxista.org