

Hoy sale en el Bopa la consulta del proyecto de construcción del teleférico de 4,4 kilómetros que salvará un desnivel de 509 metros, al calor de las subvenciones europeas, en una mina que se está restaurando con fondos públicos tras dejarla abandonada la iniciativa privada. Ahora una empresa sin solvencia económica quiere estrujar lo recuperado masificando la zona, para rentabilizar la subvención, a lo que nos oponemos desde la Coordinadora Ecoloxista.
Saldría de la zona de Pandelo, a unos 1.014 metros de altitud para llegar al puerto de Cienfuegos. El acceso se haría aprovechando la antigua carretera que atravesaba los terrenos de la mina hasta el pueblo de Villarín, y cuya rehabilitación forma parte del proyecto de restauración ambiental que lleva a cabo Tragsa.
La zona del proyecto se encuentra en un área de alta biodiversidad, con especies endémicas y ecosistemas frágiles que se están recuperando después de la salvaje explotación minera que el Principado consiente y permitió que nunca se restaurara en otro ejemplo más de la negligencia del servicio de Minas que permite que las explotaciones quiebren sin restaurar nada a pesar de las continuas denuncias que realizamos desde la Coordinadora Ecoloxista.
La construcción del teleférico y las infraestructuras asociadas pueden generar impactos como la pérdida de hábitat, la fragmentación de ecosistemas y la alteración de los patrones de migración de la fauna, una vez empiece a funcionar, hay que recordar que es una zona osera y uno de los pocos reductos con presencia de urogallo en Asturias.
Un proyecto con una inversión de más de 14 millones, que nadie dice quién los va poner, por supuesto de donde va salir el dinero para mantenerlo y actualizar el sistema, solo hay que ver el pufo que nos sale a los asturianos el último remonte de la estación invernal de Pajares, para que sea viable económicamente el de Ibias se tiene que masificar la zona con el correspondiente impacto en una zona de elevado natural que se puede recuperar con la restauración en marcha, este remonte hipotecaría para siempre el lugar, todo para intentar conseguir rentabilidades, que lo tendría difícil por su ubicación.
En Asturias en las últimas décadas hay varios proyectos de construcción de remontes mecánicos, que por suerte no han dejado de ser eso proyectos tanto en zona naturales como Cangas de Onís, Cabrales y Morcín como urbanas en Oviedo. El papel lo soporta todo pero la iniciativa privada exige rentabilidad económica, que exige miles de usuarios, lo que vemos es que al final son las administraciones las que tienen que asumir estas instalaciones con el consiguiente impacto económico en las cuentas públicas.
A los vecinos de Ibias hay que ofrecerles un futuro no puede ser a cuenta de llenar de turistas de fin de semana el lugar como pretende el proyecto ahora a consulta ambiental.
Coordinadora Ecoloxista d’Asturies
Tfno 629892624 (Fruti)