Un accidente que no podía suceder

El siniestro sucedido en Química del Nalón en Trubia, ha vuelto a situar la gravedad de vivir cerca de empresas químicas,  así lo sintieron os los vecinos de Trubia y pueblos limítrofes a Trubia que tuvieron  un día angustioso.

Dejando a un lado, que este tipo de accidente tiene la posibilidad de suceder (como ha quedado patente), y que la empresa tuvo que recabar ayuda de emergencia exterior al no poder, con sus propios medios de seguridad, sofocar el incendio, queremos MANIFESTAR NUESTRA INDIGNACION POR LA DESPROTECCIÓN EN LA QUE Se ENCONTRARON LOS VECINOS, por los siguientes MOTIVOS:

El siniestro sucedido en Química del Nalón en Trubia, ha vuelto a situar la gravedad de vivir cerca de empresas químicas,  así lo sintieron os los vecinos de Trubia y pueblos limítrofes a Trubia que tuvieron  un día angustioso.

 

Dejando a un lado, que este tipo de accidente tiene la posibilidad de suceder (como ha quedado patente), y que la empresa tuvo que recabar ayuda de emergencia exterior al no poder, con sus propios medios de seguridad, sofocar el incendio, queremos MANIFESTAR NUESTRA INDIGNACION POR LA DESPROTECCIÓN EN LA QUE Se ENCONTRARON LOS VECINOS, por los siguientes MOTIVOS:

 

Ante todo subrayar nuestra preocupación por la ubicación de una industria tan potencialmente peligrosa, en un lugar tan inadecuado por su extrema cercanía a viviendas habitadas. En un núcleo de 2 Km. existen 6.000 personas residiendo, y muchas viviendas de Trubia se encuentran pegadas a la industria.

 

PRIMERO.-

 

INDUSTRIAL QUIMICA DEL NALÓN Y AUTORIDAD COMPETENTE (CONSEJERÍA DE MEDIO AMBIENTE DEL PRINCIPADO DE PRINCIPADO) NO CUMPLEN LA LEGALIDAD VIGENTE:

 

Incumplimiento del RD 1254/1999, de 16 de julio, por el que se aprueban medidas de control de los riesgos inherentes a los accidentes graves, en los que  intervengan sustancias peligrosas (BOE número 172 de 20/7/1999), modificado por RD 948/2005, de 29 de julio, que en su artículo 16 dice:

 

“Información a la población relativa a las medidas de seguridad.

 

La autoridad competente, en cada caso, en colaboración con los industriales de los establecimientos (que operen con sustancias peligrosas), deberá asegurar que las personas que puedan verse afectadas por un accidente grave que se inicie en dichos establecimientos, reciban la información sobre las medidas de seguridad que deben tomarse y sobre el comportamiento a adoptar en caso de accidente.

 

Esa información se revisará mínimo cada tres años. La información estará a disposición del público de forma permanente.

 

La información recogerá, al menos, los datos que figuran en el anexo V”.

 

Este anexo contiene 11 puntos, entre los cuales están los siguientes:

 

Información sobre las sustancias peligrosas y nivel de peligrosidad de las mismas.

– Información sobre los principales tipos de riesgos de accidente grave, incluidos sus efectos potenciales en las personas, los bienes y el medio ambiente.

Medidas y comportamiento a adoptar por la población en caso de accidente grave.

Posibilidad de ampliar la información.

 

La autoridad competente, en cada caso, en colaboración con los industriales de los establecimientos (que operen con sustancias peligrosas), deberá asegurar que todas las personas y todos los establecimientos abiertos al público (tales como escuelas y hospitales) que puedan verse afectados por un accidente grave que se inicie en un establecimiento reciban con regularidad y en la forma más apropiada, SIN QUE TENGAN QUE SOLICITARLO, la información sobre las medidas de seguridad que deben tomarse y sobre el comportamiento que debe adoptarse en caso de accidente.

 

SEGUNDO.- No tenemos constancia, de ningún plan de seguimiento y vigilancia de la salud a la población afectada, toda vez, que el humo tóxico continúa hasta la fecha.

 

No tenemos constancias de la existencia de controles médicos a la población afectada, especialmente la más vulnerable: ancianos, niños, y personas con enfermedades respiratorias.

 

No se tiene constancia, por todo lo anterior, de la intención, por parte de las autoridades competentes (Consejería de Salud), de realizar un informe sobre los efectos y consecuencias para la salud derivadas del accidente grave producido.

 

TERCERO.– No se han tenido en cuenta, las innumerables llamadas telefónicas, realizadas desde Trubia, y pueblos limítrofes al servicio 112, alertando EN OCASIONES ANTERIORES, así como las denuncias que hemos presentado por estos reiterados problemas de la percepción de molestos olores de emisiones de hidrocarburos aromáticos de Industrial Química del Nalón, mismos, porque no sólo ocasionan molestias evidentes (picor ojos y garganta, dolor de cabeza..), sino que resultan extremadamente peligrosos por su potencial carcinogénico (cáncer).

 

Las contadas apariciones de la Guardia Civil, a instancia del 112 por la zona, posteriores a alguna de las llamadas, no se tiene constancia de que hayan sido seguidas de ningún requerimiento a la industria, ni ninguna medida correctora, teniendo los vecinos en todo momentos, un desinformación total y en algunos casos, problemas por comunicar estos escapes.

 

CUARTO.- La posibilidad de permitir una industria con sustancias peligrosas e inflamables en la zona, a 1 Km., de Industrial Química del Nalón, como es la central de ciclo combinado (gas-gasoil) de GENSA, en tramitación, elevaría el riesgo debido al EFECTO DOMINÓ. Dicho efecto, se contempla en el RD 1254/1999, de 16 de julio (por el que se aprueban medidas de control de los riesgos inherentes a los accidentes graves en los que intervengan sustancias peligrosas), “según el cual la probabilidad y consecuencias de un accidente grave pueden verse incrementadas debido a la ubicación, y a la proximidad entre establecimientos que manejen sustancias peligrosas”.

 

La central de ciclo combinado de GENSA tendría un depósito de 5.000 m3 de gasoil, para operar en caso de fallo de suministro de gas natural, y se ubicaría a 1 Km. escaso de Química del Nalón.

 

QUINTO.- Una política de prevención adecuada no puede tener como mayor aliado al AZAR. Si no hubiera habido viento, la población de Trubia se vería afectada hasta el punto de ser evacuada in-extremis.

 

SEXTO.- Necesitamos seguridad en cuanto a la PROTECCIÓN DE LOS DEPÓSITOS DE HIDRÓGENO, adyacentes a los de naftalina que ardieron, debido a su peligrosidad en caso de explosión. El hidrógeno se desplaza por la atmósfera con una velocidad superior en 15 veces a la del aire.

 

 

Si se mezcla con el oxigeno del aire y salta una chispa, se propagarían como una lengua de fuego, provocando una EXPLOSION EN CADENA.

Los depósitos aparte de seguros, deben estar  A UNA DISTANCIA ADECUADA, LO MÁS AISLADOS POSIBLES A UN POTENCIAL FUEGO.

 

 

EXIGIMOS QUE EL ACCIDENTE EN QUIMICA DEL NALÓN SIRVA PARA QUE LA EMPRESA REFUERCE LAS MEDIDAS DE SEGURIDAD Y ANTE TODO, TANTO LA EMPRESA COMO LAS AUTORIDADES COMPETENTES CUMPLAN LA LEGALIDAD VIGENTE EN TODAS LAS EMPRESAS ASTURIANAS, ALGUNAS DE ELLAS MUCHOS MAS PELIGROSAS.

 

 

Coordinadora Ecoloxista d’Asturies

Para más información tfno.  657067257 (Lydia) y 629892624 (Fruti)