Desde la Coordinadora Ecoloxista consideramos que la política de movilidad en Gijón está a la vanguardia del despropósito en materia medioambiental y seguridad para los colectivos vulnerables.
La concejalía de tráfico, movilidad y transporte público, no sólo deroga cualquier medida medioambiental que rebaje la polución provocada por el tráfico en las calles de Gijón, si no que además presume de querer rebajar al mínimo las zonas de bajas emisiones, compromete la seguridad de los menores en los entornos escolares y ahora también quiere poner palos en las ruedas a la movilidad sostenible. Todo ello sin alternativas, borrando del mapa los itinerarios y anteponiendo excusas rocambolescas como que va a dejar “que los carriles se borren”, como método para eliminarlos.
A parte de la propia seguridad de los ciclistas y usuarios de la vía, renunciar a una movilidad más sostenible es también renunciar a rebajar el ruido, la contaminación por partículas finas (PM10/2.5), compuestos volátiles de todo tipo, así como otros gases procedentes de la combustión como el NOX y el Ozono. Gases de los que Gijón tiene estudios recientes en entornos escolares y cuyas estaciones de control tampoco entrarían dentro del rango propuesto por la UE, 20 ug/m3 frente al actual de 40 ug/m3 y que están lejos del propuesto por la OMS 10 ug/m3.
Es por ello que pedimos al ayuntamiento que se tome en serio todas las advertencias de la comunidad científica, médica y educativa para que se rebaje la contaminación en los entornos urbanos, siendo Gijón además, una ciudad muy contaminada también por su gran actividad industrial y el tráfico de graneles.
Coordinadora Ecoloxista d’Asturies