Crítica al Plan de Conservación del Urogallo Cantábrico

Consejería de Agroganadería y Recursos Autóctonos

Dirección General de Recursos Naturales

C/ Coronel Aranda nº 2

33005 Oviedo

 

 

 

 

 

La Coordinadora Ecoloxista d’Asturies, con domicilio a efecto de notificaciones postales en la calle Padre Teral nº 26 –Q de Villalegre en Avilés y con el correo electrónico correo@coordinadoraecoloxista.org, entidad inscrita en el registro de Asociaciones del Principado de Asturias con el nº 34 sección segunda con Cif – G33247891 y, en su representación, Fructuoso Pontigo Concha, con DNI 11393200-N, ante esta Unidad Administrativa comparece y, como mejor proceda en Derecho,

 

EXPONE:

 

Primero.

 

El urogallo cantábrico (Tetrao urogallus cantabricus) está clasificado como En Peligro de Extinción de acuerdo a los criterios internacionales de IUCN, con un área ocupada menor de 2.000 km2, muy fragmentada, y una población que probablemente no supera los 500 individuos, en rápida disminución. Se considera que, de seguir la tendencia, el urogallo cantábrico podría extinguirse en las próximas tres décadas.

 

 

Segundo.

 

De acuerdo a la revisión del Libro Rojo de las Aves de España y demás bibliografía de referencia, la principal causa de su declive es la pérdida y fragmentación del hábitat y las poblaciones, especialmente en la forma de reducción del tamaño y fragmentación de las masas boscosas en las que viven (se trata de una especie asociada a grandes extensiones de bosques con una estructura vegetal poco perturbada). La segunda causa en importancia serían las molestias humanas como actividades de caza, la apertura de pistas forestales y minas a cielo abierto. En algunas zonas se ha encontrado que los choques con tendidos eléctricos y vallados cinegéticos son causas de importante mortalidad de urogallos.

 

En Asturias hoy en día solamente el 23 % del área de distribución histórica del urogallo está ocupada por bosques y sólo un 1,4 % de estos bosques tiene un área superior a 1 km2. La deforestación en la región tuvo su último episodio intensivo a mediados del Siglo XX, cuando se produjo importantes reducciones del área ocupada por hayedos y robledales. Otro factor histórico de importancia es que el urogallo cantábrico fue legalmente cazado hasta 1979, cuando dejó de considerarse especie cinegética debido al fuerte declive que estaba sufriendo.

 

 

Tercero.

 

Se ha emprendido un programa de conservación basado en: la caza de especies silvestres como zorros, martas, garduñas, córvidos, azores, y jabalíes por su posible efecto depredador, la retirada de puestas de urogallos silvestres, la cría en cautividad (el Centro de Cría de Sobrescobio en Redes), y la apertura de zonas de matorral en zonas habitadas por el urogallo.

 

El plan padece de un grave error de enfoque si tenemos en cuenta que:

 

  • No se centra en las causas fundamentales del declive, antes señaladas, según las cuales los objetivos prioritarios deberían ser aumentar la extensión de superficie ocupada por bosques naturales, mejorar la conectividad ecológica de los actuales fragmentos mediante corredores forestales, restringir las prácticas silvícolas que alteran la estructura natural de la vegetación, y limitar las prácticas cinegéticas, la proliferación de tendidos eléctricos y la apertura de pistas forestales y minas a cielo abierto.

 

  • No hay datos que cercioren que las especies señaladas como “depredadoras” en el programa tengan influencia en el declive que sufre el urogallo cantábrico, y debido al fundamental y complejo papel ecológico que juegan los depredadores en los ecosistemas sí es posible que puedan generarse “efectos cascadas” de consecuencias inesperadas y potencialmente negativos para el urogallo.

 

  • No hay evidencias que permitan afirmar que la apertura de zonas de matorral tengan un efecto positivo sobre el urogallo cantábrico (sus defensores señalan un hipotético beneficio por el incremento de arándanos, alimento habitual del urogallo cantábrico allí donde coexisten, aunque algunas de las poblaciones de urogallo cantábrico que se conservan mejor viven en zonas sin arándanos), y debido a la sensibilidad que tiene a las perturbaciones humanas es posible que estas actuaciones humanas en zonas habitadas por la especie generen por el contrario un efecto negativo. Se tiene constancia que las poblaciones de urogallo cantábrico que se encuentran en mejor estado suelen ser las que habitan las regiones con menor poblamiento humano y menor alteración humana del medio (incendios, apertura de pastos, desbroce de matorral, etc.).

 

  • Los programas de cría son actualmente bastante cuestionados por la comunidad científica debido a su escasa rentabilidad (elevados costes, resultados escasos) frente a otras alternativas mucho mas eficaces como son la conservación del hábitat. Los programas de cría en cautividad han sido expresamente desaconsejados para el urogallo por la organización científica UICN (Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza) y todos los realizados en Europa han fracasado en su objetivo de establecer una población viable y autónoma.

 

 

Cuarto.

 

Hemos tenido conocimiento del nuevo fracaso reproductor ocurrido este año en el Centro de Cría en Cautividad del Urogallo de Sobrescobio en Redes, que se suma a la extensa historia de fracasos que se recopila año tras año (mortalidad masiva de las puestas de huevos y de los pocos pollos que consiguen eclosionar, parejas que no se reproducen, reproductores originarios de saqueos de nidos silvestres o ejemplares de urogallos “mansos” o “locos”,…).

 

 

Por todo ello, SOLICITAMOS:

 

– El cese del actual Programa de Conservación del Urogallo Cantábrico y todas las actuaciones contempladas en el mismo, incluyendo la clausura del programa de cría en cautividad que se está realizando.

 

– El diseño de un nuevo programa de conservación centrado en aumentar la extensión de superficie ocupada por bosques naturales, mejorar la conectividad ecológica de los actuales fragmentos mediante corredores forestales, restringir las prácticas silvícolas que alteran la estructura natural de la vegetación, y limitar las prácticas cinegéticas, la proliferación de tendidos eléctricos y la apertura de pistas forestales y minas a cielo abierto.

 

 

OTROSÍ DIGO: Que sobre la base de lo dispuesto en la Ley 27/2006, de 18 de julio, por la que se regula los derechos de acceso a la información, de participación pública y de acceso a la justicia en materia de medio ambiente, y con motivo del presente escrito,

 

SOLICITO la siguiente información ambiental:

 

– Que se nos confirmen los hechos referidos anteriormente, indicando el número de puestas y huevos que han fracasado a lo largo de la historia del programa de cría en cautividad, su origen y las causas de mortalidad.

 

– Que se nos haga saber el número de puestas y huevos retirados del medio natural desde el comienzo del proyecto, así como el lugar de procedencia y la tasa de supervivencia una vez llegados al centro de cría, e igualmente sobre los ejemplares “mansos” o “locos”.

 

– Que se nos informe sobre las acciones de captura. En particular, sobre los lugares en los que se han efectuado desnides y trampeos y sus resultados, así como aquellos lugares donde se tenga programado llevarlos a cabo en el futuro, sobre los criterios utilizados en la elección de estos lugares y sobre el modo en que se ha evaluado el impacto sobre la población silvestre, tanto de los trabajos de captura como de la retirada de puestas.

 

– Que se nos informe sobre el número de urogallos existentes en el centro actualmente o que hayan muerto en el mismo desde que se inició el programa de cría, así como sobre el origen de cada ejemplar (actuales y pasados).

 

– Que se nos haga llegar copia del documento técnico elaborado por el LIFE+ del urogallo cantábrico que debería dar soporte a este proyecto y que debería haber sido elaborado previamente a cualquier intervención sobre la especie en el medio natural.

 

– Que se nos indique porqué los repetidos fracasos y muertes de urogallos en el centro de cría en cautividad no han sido puestos en conocimiento de la opinión pública en la página Web del LIFE, cuya función es informar sobre el desarrollo del proyecto.

 

– Que se nos informe del programa de eliminación de zorros, martas, garduñas, córvidos, azores, jabalíes y demás especies consideradas “depredadoras” según el plan, detallando lugar concreto y fecha de cada actuación (batida, captura con trampas, etc.) así como los ejemplares de cada especie eliminados en cada uno.

 

– Que se nos informe del programa de apertura de zonas de matorral en áreas habitadas por el urogallo, detallando lugar concreto (con precisión GPS), fecha, extensión y proximidad a cantaderos de urogallo de cada actuación

 

– Que se nos informe del presupuesto detallado de todas las actuaciones del Plan, incluyendo las capturas y desnides en el medio natural, el programa de cría en cautividad, la caza de especies supuestamente depredadoras, y la apertura de zonas de matorral.

 

– Que se nos indique el nombre de la persona que en nombre del Gobierno del Principado de Asturias ostenta las competencias de gestión del centro de cría en cautividad del urogallo, y de cómo justifica la discordancia entre las causas del declive señaladas científicamente y el enfoque y actuaciones del actual Programa de Conservación del Urogallo Cantábrico.

 

 

Y se tenga por presentada la presente solicitud de información ambiental y se conteste a la misma en el término legalmente establecido de un mes, según lo dispuesto en el artículo 10.2 c) de la Ley 27/2006 referida, para cuyo silencio establece el efecto positivo el Decreto 67/2002, de 16 de mayo, por el que se aprueban las normas relativas a los procedimientos administrativos de la Administración del Principado de Asturias, teniéndome por interesado en el que se inicia a medio de la presente solicitud.

 

 

En Avilés, a 7de noviembre de 2013

 

 

 

 

Fdo. Fructuoso Pontigo Concha de la Coordinadora Ecoloxista d’Asturies