Hoy publica el Bopa la autorización de la Consejería de Transición Ecológica, Industria y Desarrollo Económico, por la que se formula la declaración de impacto ambiental de instalación de una planta de producción de hierro en reducción directa (DRI) en la factoría de ArcelorMittal en Gijón.
Es llamativo que el Ayuntamiento de Gijón no presentara alegaciones algunas al proyecto presentado por la empresa, lo que sí hizo el de Carreño también afectado, lo que da idea de la dejación ambiental de la anterior corporación municipal gijonesa en este tema.
Una vez más el Principado autoriza una nueva reforma del complejo siderúrgico sin resolver las numerosas emisiones y los vertidos de la factoría que afectan a su entorno y que habíamos reclamado desde la Coordinadora Ecoloxista.
Debemos mirar con mucha cautela la actitud de esta empresa que, lejos de responsabilizarse de la grave contaminación que hay en la actualidad en el área de Gijón y Carreño niega su responsabilidad, nos preocupa que una nueva instalación pueda acrecentar el problema en un entorno contaminado que necesita de soluciones muy distintas.
El proyecto aprobado no garantiza el funcionamiento del sistema de encapsulamiento del nuevo horno, pues podría no ser suficiente para captar las emisiones primarias y secundarias, así como otras emisiones difusas del proceso y evitar su dispersión.
La nueva torre de 155 metros del complejo no presenta un adecuado estudio de dispersión, lo que va hacer con esta mayor altura es dispersar más la contaminación y no reducirla, como ya se ha hecho con el aumento de la altura de la chimenea del sinter.
No nos parece suficiente las medidas para reducir las continuas emisiones de dioxinas y furanos que se produzcan, no nos parece suficiente con la inyección de carbono activo y el enfriamiento de las emisiones mediante la nebulización con agua.
Es preciso tomar medidas para cubrir los parques de minerales y reducir de esta forma las emisiones difusas del almacenamiento de chatarras con contenidos finos que por la acción del viento puede generar dispersión de partículas en el entorno, no nos parecen suficientes las barreras cortavientos para los parques como se autoriza..
Igualmente, para evitar las frecuentes caídas de tensión en el filtro de mangas y dejar de filtrar, es necesario que tenga una segunda línea de alimentación eléctrica.
Antes de renaturalizar el río Aboño y Pinzales como se solicita, lo primero es dejar de verter a ambos cauces con el correspondiente impacto, hay que recordar que el río Aboño presenta una elevada contaminación en su desembocadura.
Coordinadora Ecoloxista d’Asturies
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