La aprobación en el pleno del Parlamento Europeo de la resolución de la Comisión de Medio Ambiente sobre salud y campos electromagnéticos, de acuerdo al informe, elaborado por la eurodiputada liberal belga Frédérique Ries, ha sido aprobada por una amplísima mayoría de 559 eurodiputados a favor, 22 en contra y 8 abstenciones. Esta resolución significa un punto de inflexión y un cambio de tendencia de las instituciones europeas en relación a los impactos ambientales y de salud pública de los campos electromagnéticos.
La aprobación en el pleno del Parlamento Europeo de la resolución de la Comisión de Medio Ambiente sobre salud y campos electromagnéticos, de acuerdo al informe, elaborado por la eurodiputada liberal belga Frédérique Ries, ha sido aprobada por una amplísima mayoría de 559 eurodiputados a favor, 22 en contra y 8 abstenciones. Esta resolución significa un punto de inflexión y un cambio de tendencia de las instituciones europeas en relación a los impactos ambientales y de salud pública de los campos electromagnéticos.
El informe constata, bajo el peso de la evidencia científica, los efectos biológicos de la contaminación electromagnética y los posibles efectos sobre la salud derivados de una exposición residencial. Esta decisión debe convertirse en un primer paso hacia una directiva europea que plantee niveles de emisión mucho más restrictivos bajo el principio de precaución, como así lo han comenzado a hacer países europeos de nuestro entorno: Italia, Suiza, Luxemburgo, Bélgica, etc.
Los principales aspectos de la resolución aprobada son los siguientes:
– Disminución y adecuación de los actuales límites de los Campos Electromagnéticos (CEM) y consideración específica de los efectos biológicos de éstos.
– Solicitar a los estados miembros y la industria, nuevas tecnologías para reducir la exposición a los CEM.
– Plantear alejar las nuevas estaciones base y líneas de transmisión de centros de enseñanza, geriátricos y centros sanitarios.
– Pedir a la Comisión que elabore un informe anual sobre los niveles de la UE de los CEM y las medidas adoptadas para proteger la salud humana y el medio ambiente.
– Lamentar el retraso en la publicación del informe Interphone, y pedir a la Comisión obtener de los responsables del proyecto las conclusiones definitivas y por qué no se han publicado y, en caso de que reciba una respuesta, que informe al Parlamento y a los Estados miembros sin demora.
Con este importante respaldo desde la Coordinadora Ecoloxista hemos solicitado de nuevo al Principado la paralización inmediata de la instalación de nuevas antenas de telefonía móvil que estén ubicadas en las proximidades de viviendas por la posible contaminación generada por la radiación electromagnética.
No hay que olvidar que las radiaciones no ionizantes, que son la base del funcionamiento de la telefonía móvil, están siendo objeto de numerosas investigaciones, las cuales requieren muchos años y han de ser muy rigurosas para poder obtener conclusiones extrapolables a los seres humanos. Desde hace muchos años están perfectamente reconocidos y aceptados por la comunidad científica los efectos térmicos de la radiación ligada a la telefonía móvil. Única y exclusivamente para evitar estos efectos se ha establecido una limitación en la exposición del público.
Menos conocidos y más controvertidos son los efectos no térmicos, causantes con seguridad de efectos biológicos, pero con consecuencias clínicas desconocidas. Para proteger a la población de las posibles consecuencias en la salud derivadas de los efectos no térmicos, los científicos independientes reclaman con insistencia medidas de precaución por encima de las establecidas. No obstante, las operadoras y los científicos al servicio de las mismas, insisten en minimizar la posibilidad de ocurrencia de dichos efectos adversos a la salud.
A pesar de nuestros constantes requerimientos en los últimos años al Principado para que tome medidas con la actual situación de descontrol total de las antenas repetidoras de telefonía, estas instalaciones siguen colocándose vulnerando el actual marco administrativo con la complicidad de los Ayuntamientos y con el silencio del Principado.
A pesar de que ya hay varias comunidades que han tomado medidas reguladoras, como Cataluña, Extremadura, Murcia, Valencia, por ejemplo, Asturias sigue sin tomarlas.
El gobierno Regional no esta haciendo nada a pesar de nuestras constantes peticiones y de las quejas de muchos afectados en toda Asturias. No solo no se hace nada, sino que además se está consintiendo que las empresas instaladoras engañen a los vecinos, comunidades y propietarios de los terrenos y tejados sin que ni el Principado ni los Ayuntamientos estén atendiendo numerosas quejas de vecinos que están preocupados.
Coordinadora Ecoloxista d’Asturies
Para más información tfno. 657067257 (Lydia) y 629892624 (Fruti)
https://www.coordinadoraecoloxista.org/