No ganamos para disgustos en la salud de los asturianos. Si la pasada semana fue la confirmación La agencia de investigación del cáncer de la Organización Mundial de la Salud (OMS) que clasificó a la contaminación del aire en las ciudades como un agente que produce cáncer en los seres humanos, esta nos enteramos que la exposición a los contaminantes del aire durante el embarazo aumenta significativamente el riesgo de un menor crecimiento fetal.
Los investigadores estiman que, por cada aumento de 5 microgramos por metro cúbico (5μg/m³) en la exposición a las partículas finas (PM2,5) durante el embarazo, el riesgo de bajo peso al nacer aumenta en un 18%.Se trata de un aumento habitual de estas partículas que se encuentran en, por ejemplo, las emisiones de los vehículos y los contaminantes atmosféricos industriales. Es importante destacar que este incremento del riesgo persiste en niveles por debajo del límite de calidad del aire existente.
Según dice Marie Pedersen, autora principal del estudio e investigadora del Centro de Investigación en Epidemiología Ambiental (CREAL), centro de la alianza ISGlobal. "Nuestros hallazgos sugieren que una proporción importante de los casos de bajo peso al nacer podría evitarse en Europa si la contaminación del aire urbano, partículas particularmente finas, se redujera",