CONSIDERACIONES SOBRE LA INCIDENCIA DE LOS LOBOS EN EL SECTOR GANADERO, EL DECLIVE DEL GANADO

ALGUNAS CONSIDERACIONES SOBRE LA INCIDENCIA DE LOS LOBOS EN EL SECTOR GANADERO, EL DECLIVE DEL GANADO EN ASTURIAS Y SOBRE LA CONSIDERACIÓN DE LA ESPECIE COMO CINEGÉTICA.

Ante la falsa polémica sobre los daños de lobos generado por algunos ganaderos en las ultimas fechas  los grupos ecologistas abajo firmante queremos recordar algunos datos y comentarios, para situar la realidad del lobo y la ganadería asturiana en estos momentos.

Desde la entrada en vigor del Plan de Gestión del lobo en Asturias, hemos reseñado que la declaración de zonas “libres de lobos” podía erigirse en un objetivo utópico y, como tal, generador de polémica permanente. El caso de la sierra del Cuera así lo ha demostrado. En el contexto de una población de lobos que supera los límites regionales y por tanto los de una sierra concreta, no tiene sentido plantear la eliminación de la especie a nivel local, pues la dispersión de lobos procedentes de áreas limítrofes impedirá la consecución del objetivo inicial. Tal situación convierte a la sierra del Cuera, por ejemplo, en un sumidero permanente y en una fuente de disputa continua, generando además una situación de desigualdad en la región. El caso del Cuera y, en general, la inadecuada gestión del lobo en el oriente de Asturias se agrava por la nefasta gestión de la especie en el Parque Nacional de Picos de Europa, donde su persecución no cesa ni siquiera en época de cría, como se viene demostrando en los últimos años, incluido 2007.

ALGUNAS CONSIDERACIONES SOBRE LA INCIDENCIA DE LOS LOBOS EN EL SECTOR GANADERO, EL DECLIVE DEL GANADO EN ASTURIAS Y SOBRE LA CONSIDERACIÓN DE LA ESPECIE COMO CINEGÉTICA.

Ante la falsa polémica sobre los daños de lobos generado por algunos ganaderos en las ultimas fechas  los grupos ecologistas abajo firmante queremos recordar algunos datos y comentarios, para situar la realidad del lobo y la ganadería asturiana en estos momentos.

Desde la entrada en vigor del Plan de Gestión del lobo en Asturias, hemos reseñado que la declaración de zonas “libres de lobos” podía erigirse en un objetivo utópico y, como tal, generador de polémica permanente. El caso de la sierra del Cuera así lo ha demostrado. En el contexto de una población de lobos que supera los límites regionales y por tanto los de una sierra concreta, no tiene sentido plantear la eliminación de la especie a nivel local, pues la dispersión de lobos procedentes de áreas limítrofes impedirá la consecución del objetivo inicial. Tal situación convierte a la sierra del Cuera, por ejemplo, en un sumidero permanente y en una fuente de disputa continua, generando además una situación de desigualdad en la región. El caso del Cuera y, en general, la inadecuada gestión del lobo en el oriente de Asturias se agrava por la nefasta gestión de la especie en el Parque Nacional de Picos de Europa, donde su persecución no cesa ni siquiera en época de cría, como se viene demostrando en los últimos años, incluido 2007. 

 

A nuestro entender, la existencia de zonas “libres de lobos” es uno de los puntos más débiles del plan de gestión y puede llegar a poner en peligro su viabilidad en toda la región.

 

 

Datos aportados en el informe del Plan 2005-2006:

 

El porcentaje de ganado afectado fue el 0,55% sobre el total del censo ganadero (excluido el equino, del que no existe un censo detallado); el porcentaje de ganaderos afectados es del 4,1% sobre el total de explotaciones (un 0,33% en relación al conjunto de la población de las zonas loberas); sólo un 28% de los afectados percibieron más de 634 euros por daños de lobo al año, mientras que lo pagado en concepto de daños supuso el 0,86% de lo percibido en concepto de subvenciones (un 0,23% de lo que supuso la renta agraria).

 

Por otro lado, el declive en cabezas por km2 fue más acusado en las zonas sin lobos (un descenso del 4,4% entre 2000 y 2004) que en las zonas con daños de lobo (un descenso del 2,8% para el mismo periodo.

 

A la vista de estos datos, representantes de ganaderos reconocieron en la reunión del Comité Consultivo de 15 de junio de 2005 que el declive anotado en los últimos años en el sector “no se debe a la presencia del lobo, pero demuestra la problemática de abandono tan grande que afecta al sector ganadero” (ver Acta de la reunión)

 

Datos aportados en el informe del Plan 2006-2007:

 

El porcentaje de ganaderos afectados en las zonas loberas fue de un 4,1% del total de explotaciones, y el de reses afectadas fue un 0,75% del censo ganadero en el área de distribución del lobo. El porcentaje de lo que suponen los daños fue 0,96% del total de subvenciones percibidas en el sector.

 

Consideramos que estos porcentajes de afección son muy bajos y difíciles de rebajar aún más si no es exterminando a la especie en gran parte de la región, o realmente adoptando medidas de manejo de ganado que puedan prevenir daños. En este sentido, la propia administración ha emprendido líneas de ayuda para adoptar medidas preventivas de daños que sin embargo no han sido bien acogidas por el sector ganadero, lo que constituye el punto más débil en cuanto a implicación del sector ganadero de cara a adquirir algunos compromisos en el marco del Plan de Gestión. De hecho, la administración ha sacado dos líneas de subvenciones para adoptar medidas preventivas y de manejo de ganado, de las que una de ellas se ha saldado con dos solicitudes y la otra con ninguna, por lo que realmente pedimos a los sindicatos ganaderos que hagan públicos los compromisos concretos que van a adoptar o que hagan propuestas concretas en este sentido. Del mismo modo, solicitamos a la administración que haga una petición oficial a los sindicatos ganaderos sobre propuestas y compromisos para adoptar medidas preventivas.

 

Evolución del censo ganadero en las zonas loberas vs. zonas no loberas:

 

Si bien es cierto que el sector ganadero atraviesa por dificultades estructurales originadas quizá, entre otras causas, por las políticas agrarias comunitarias, también es cierto que la presencia de lobos no es la causa de tales problemas, como ha sido reconocido por los propios representantes de sindicatos ganaderos (ver Actas de las reuniones del Comité Consultivo) y por los datos de evolución del censo ganadero en la región (ver evolución del censo ganadero en las zonas loberas y las zonas “sin daños”, Tabla 4, Plan 2005-2006). Sin embargo, en declaraciones recientes a los medios de comunicación, varios representantes de sindicatos ganaderos (algunos con representación en le Comité Consultivo del Plan del Lobo) vuelven a culpar a los daños que ocasionan los animales salvajes (y muy especialmente los lobos) como la principal causa del declive del ganado en la región y de casi todos los problemas que atraviesa el sector en los últimos tiempos, generando una clara incongruencia con sus declaraciones en las reuniones del consejo consultivo.

 

En relación a las propuestas de representantes ganaderos de solicitar la consideración de la especie como cinegética:

 

Seguimos rechazando la consideración del lobo como especie cinegética. Aunque entendemos que quizá es legítimo reclamar tal consideración, las razones en contra, tanto técnicas como éticas, son abrumadoras.

 

La administración asturiana lleva a cabo compensaciones por daños de lobo, pagadas con fondos públicos. Además, los ganaderos asturianos reciben cuantiosas subvenciones con fondos públicos, muchas de las cuales llevan implícitos compromisos de conservación. En cualquier caso, si la legislación contempla finalmente a la especie como sometida a explotación cinegética, exigiremos que los pagos por compensaciones de daños causados por la especie no sean sufragados con fondos públicos, sino del propio colectivo de cazadores que aprovecha, por ocio y de forma extractiva, pero con la posibilidad de generar recursos económicos, a la especie. Elevaremos también estas exigencias a las administraciones europeas que gestionan buena parte de tales fondos públicos, de los que Asturias es beneficiaria neta.

 

Pago de daños en zonas libres de lobos

 

Por otro lado, nos preocupa la gestion de los daños en   aquellas zonas que sean consideradas como “libres de lobos” o en aquellas otras que no siendo consideradas oficialmente como tales, los ejemplares o las poblaciones sean sometidos a un control tal que de hecho funciones demográficamente como sumideros (por ejemplo: Áramo, Cuera, entorno de Picos de Europa, Manteca, Cudillero, etc.)

 

Creemos necesario la conservación de la actividad ganadera en zonas de montaña que esta desapareciendo con la conservación de las especies salvajes como el lobo.

 

Asociación para la Conservación y Estudio del Lobo Ibérico – ASCEL

Asociación Asturiana de Amigos de la Naturaleza – ANA

Asociación Medioambiental la Cirigueña

Coordinadora Ecoloxista de Asturias

Colectivo Ecologista de Avilés

Grupo de Recuperación y Estudio de Espacios Naturales-GREEN

Plataforma para la Defensa de la Cordillera Cantábrica